Garrett Madison comenta a Alan Arnette su visión de la pelea entre Simone Moro, Ueli Steck y los Sherpa en el Everest. Madison basa su versión en lo que oyó por la radio y sus conversaciones con líderes de expediciones, guías y clientes que estaban en el Campo 2 cuando sucedieron los hechos.

El 18 de abril se realizó una reunión para discutir la estrategia de la temporada, invitando a todas las expediciones y sirdars. En ella se decidió el equipo de sherpas que instalarían la cuerda fija y se acordó que nadie estaría en la vía, aparte del grupo sherpa, los días en que se instalase. Simone Moro no estuvo en esa reunión.

El equipamiento de la ruta comenzó el 26 de abril y los tres alpinistas se dirigieron a la cara del Lhotse el 27 a pesar de que recibieron sugerencias de esperar a que acabaran los trabajos.

Cuando Moro, Steck y Griffith llegaron al punto donde se encontraban los sherpa, el líder de éstos se dirigió a uno de ellos y en un momento dado hubo un contacto físico entre ambos. Moro empezó a gritar y a insultar en nepalí a los sherpa. Éstos optaron por dejar el material que llevaban y descender al Campo 2.

Moro usó la radio en la frecuencia usada para el equipamiento de la vía y abierta a todo el mundo, para preguntar que pasaba con los sherpa y que si tenían un problema podía bajar al Campo 2 y pelear.

Moro volvió al Campo 2 y a través de la radio solicitó hablar con el equipo de 16 sherpas en una tienda de una expedición. Alguno guías occidentales sugirieron a Moro que se disculpase, mientras éstos hablaban con Moro, varios sherpas se congregaron alrededor en respuesta a la llamada que hizo desde la ruta Moro, buscando una disculpa por sus palabras.

En un momento dado un occidental que no estuvo en la cara del Lhotse se enzarzó con un sherpa, fue la chispa que hizo que saltara todo. Los sherpa pensaron que este occidental era miembro del equipo de Moro. La pelea se calmó gracias a la intervencion tanto de otros alpinistas occidentales como sherpas. Se pidió a Moro que se disculpase y éste descendió al campo base.

El día 28 fue un día tranquilo sin incidentes. El 29 se tuvo la reunión ya que Moro no quería abandonar el Campo Base sin haber hecho las paces con los sherpa.

Este es el final de la historia ya que se confirma que Moro y Steck cancelan la expedición. Steck y Griffith ya se han marchado y Moro se queda para continuar con sus labores de piloto del helicóptero de rescate.